

En estos días hemos visto como hemos pasado del confinamiento por coronavirus al resurgir de la naturaleza. Se trata de un hecho que no puede pasar por alto en un blog dedicado a la sostenibilidad. Especialmente en una sociedad cada vez más consciente del problema medioambiental.

Frases de Albert Einstein
En otras ocasiones ya os he hablado de que vivimos en una sociedad que fomenta el bien tener que no hemos de confundir con el bien estar. Tenemos todo bien atado, sin margen a la improvisación. No nos permitimos tener tiempo libre para estar solos y pensar. O mejor aún, para dejar la mente en blanco sin hacer nada. ¿Cuántas veces te has visto mirando el móvil sin ningún fin en concreto? Todo aparato tecnológico puede tener un fin, pero muchas veces se emplea para llenar un vacío que no deseamos sentir. De hacerlo, supondría un auténtico dolor que no todos estamos dispuestos a asumir. Pero en caso de atrevemos, daremos un paso hacia el camino de la paz y la libertad.
Y así sucede, cuando llega una situación fuera de nuestro control a nuestras vidas, nos descoloca. No sabemos cómo afrontarla. Y nos evoca sentimientos de miedo, frustración, incertidumbre, rabia… En definitiva, nos resistimos al cambio.
“Déjame valerme por mí mismo. Si lo haces todo por mí, nunca podré aprender. Por si lo olvidaste, sólo se aprende de los errores.” Jorge Bucay.
¿Cómo vivir una situación inesperada?
Ahora, imagina que existiera una amenaza de un virus que azotase a todo el mundo. ¿Cómo la viviríamos?
“Todas las batallas de la vida sirven para enseñarnos algo, inclusive aquellas que perdemos”. Paulo Coelho.

Venecia
Afrontar una situación inesperada con los recursos que tenemos se torna complicado. ¿A qué se debe? A que el ser humano busca en su experiencia de vida las herramientas para superarlo. Como se trata de algo nuevo, no esperado y nunca vivido, no dispone de los recursos para hacerlo frente.
Es más, cabe la posibilidad de que conozcas la teoría, pero llegado el momento de la práctica, todo cambie drásticamente. Para entenderlo mejor pondré un ejemplo: al sacarnos el carnet de conducir conocíamos la teoría, incluso habíamos hecho las prácticas relativamente bien, pero llegaba el día del examen y suspendíamos.
En la escuela nos educan para conocer la teoría de muchas circunstancias que acontecen en la vida. Incluso nos pueden servir para especializarnos a nivel teórico en un trabajo. Pero el sistema educativo industrial no fomenta la creatividad, ni nuestras virtudes. Como ya he dicho en otros artículos: nos educan para ser mentes dormidas.
En realidad, mirar de frente esta situación debería ser un acto de humildad y honestidad. Nos despojaríamos de nuestros temores y sentiríamos ese miedo sin filtros. Y tras él, llegaría un manto de libertad. Supuestamente ahí encontraremos nuestras habilidades innatas que nos facilitarán encontrar el camino.
Del confinamiento por coronavirus al resurgir de la naturaleza
Llevamos un par de semanas en casa y ya escucho comentarios de personas que no saben qué hacer. Hay quienes piensan en salir de bares en cuanto todo pase. Nos hemos adaptado tanto a lo artificial de la vida moderna, que no concebimos una forma de vida natural. De hecho, asumimos como natural lo creado por el hombre.
Y mientras todo esto acontece, la naturaleza sigue su curso. Resurge y se adapta de forma natural y rápida. Los animales salen de las madrigueras donde se habían visto confinados, para adaptarse a la libertad de desplazarse sin temor por el ser humano.
Como resultado, vemos cómo los cielos de las ciudades se limpian de polución.
La contaminación cae un 83% en Barcelona, un 73% en Madrid, un 64% en Valencia. La Vanguardia.
Los niveles de concentración de dióxido de nitrógeno, uno de los principales responsables de la contaminación del aire, han disminuido una media del 64% en las principales ciudades españolas tras las medidas decretadas para la lucha contra el COVID-19: https://t.co/UeKkThs5mr pic.twitter.com/dDTHKFDZpl
— Universitat Politècnica de València (@UPV) March 24, 2020
Los canales de Venecia renacen para albergar aguas cristalinas.
Para quienes dudan del impacto humano en nuestro entorno: Venecia sin góndolas: Y los peces volvieron a sus (ahora limpios) canales. pic.twitter.com/ksvl2CSQqj
— Gastón Gaviola (@gastongaviola) March 17, 2020
Los animales vuelven a ser libres. Y aparecen jabalís o cabras por las calles vacías de las ciudades. Incluso los pavos reales se atreven a salir del Retiro. En definitiva, la naturaleza respira como hacía décadas que no hacía.
En tan sólo dos semanas, ha sucedido lo inimaginable: un resurgir de la naturaleza.
Ante esta situación inesperada, los animales actúan dejándose llevar por la esencia de su ser. Mientras, los humanos lejos de adaptarnos, nos quejamos y esperamos con anhelo que todo vuelva a ser como antes. Como si eso fuese lo natural.
La enfermedad de este planeta es el ser humano que ha olvidado su esencia.
Únicamente pretendo abrir un espacio para cuestionarnos la forma de vivir y darnos cuenta que existe otro modo. La sociedad en la que vivimos necesita reinventarse. Nos hemos centrado en aspectos materiales y nos hemos olvidado de los esenciales. Quizás sea el momento de replantearnos si deseamos invertir en sanidad o en defensa, en educación o en deporte. ¿Dónde queremos poner el foco?
💰 Los que más cobran en el planeta fútbol: Messi lidera el ranking de jugadores y Simeone, el de entrenadores https://t.co/LixT8Tm3IB
— MARCA (@marca) March 23, 2020
¿Sabías que Messi gana 131 millones de euros al año?
Por un futuro en un mundo sostenible, aprendamos la lección y no repitamos los mismos errores. Gracias a la naturaleza por recordarnos una vez más quiénes somos y dónde estamos.
“Cada fracaso enseña al hombre lo que necesitaba aprender”. Charles Dickens.
Agradecimientos a Sergi Torres, en especial por esta charla dedicada a este momento histórico.
Si quieres más información puedes seguirme en mi cuenta de Twitter @Emilio_JFRey y en mi Blog, donde habitualmente informo sobre mis consumos, noticias y artículos que publico. Os dejo mi código de referido de Tesla: http://ts.la/emiliojose3059
6 Comentarios. Dejar nuevo
https://pasatealoelectrico.es/2018/08/11/la-historia-de-christof-sappel-como-ser-feliz-con-menos/
Hola Emilio,
no soy feliz con menos… quisiera tener tu talento de escribir! Todo lo que dices es verdad (desgraciadamente)!
Lo que añado hay que entenderlo entrecomillado:
El ser humano es la obsolescencia programada del planeta.
Creo que el Universo, incluido la Tierra, no existimos, somos un holograma.
El Coronavirus no es suficiente para que aprendamos.
Necesitamos una guerra con bombas y mucho ruido y edificios destrozados, que nos asusten.
O tal vez una religión, que pinta un infierno.
¿El motor eléctrico es la salvación?
Un abrazo 🙂
Hola Christof,
Gracias por los halagos. Espero que vaya todo bien.
El planeta ya ha demostrado que en dos semanas se puede recuperar en gran parte del daño que le hacemos. Esto deja en evidencia que el planeta por sí mismo se salvará. La cuestión es: ¿y la salvación de la humanidad?
Y esta, no sé si vendrá acompañada del motor eléctrico u otra tecnología que esté por venir. Lo que sí tengo claro es que, si la salvación llega a la especie humana, tendrá que ser en base a una gran reflexión sobre todo lo que está aconteciendo. Cuestionémonos lo que sucede y comprendamos los mensajes que esta situación nos manda. Sí y sólo si aprendemos de esta crisis, la humanidad se salvará. Esa es mi opinión.
Gracias por leerme Christof, te dejo aquí el enlace al Blog que me he creado: https://emiliojfernandezrey.wordpress.com/
Espero que sea de tu agrado 🙂
Un abrazo!
Buen articulo Emilio!!!!, dará para pensar y para muchos debates esa situacion, mientras tanto, la naturaleza campando a sus anchas!!!!!, habrase visto!!!!😅😅😅😉🙃
Hola Hugo,
Muchas gracias por leerme y tus palabras. ¡Ojalá aprendamos de esta situación! Así lo espero y deseo.
¡Tenemos pendiente esa entrevista!
Te dejo aquí mi Blog https://emiliojfernandezrey.wordpress.com/ por si quieres leer más sobre mis publicaciones.
¡Un abrazo!
Ojalá aprendamos de esto que estamos viviendo y por lo menos haya gente que cambie su estilo de vida y su forma de afrontarla. Cuando he visto el Twitt de la Universidad de Valencia que has puesto sobre la polución en las ciudades, me vino a la mente que la semana pasada me comentaba el trabajador de la gasolinera en la que paro habitualmente que ha pasado de vender unos 120.000 litros de media, a vender en el mes de marzo 20.000 litros, y eso que la primera semana de marzo fue una semana normal, ya veréis el mes de abril que la actividad se redujo drásticamente. Es algo que ya sabemos los que nos gustaría ver un mundo lo más sostenible posible, pero imaginaros un mundo de movilidad 100% eléctrica la cantidad de mierda que íbamos a dejar de quemar y tirar al medio ambiente, solamente con este gesto. Si nos lo paramos a pensar es increíble…
Por cierto, y ahora que lo pienso, gasolinera a la que espero no tener que volver nunca más, porque por fin me he comprado mi primer coche eléctrico, estoy a la espera de la entrega ^^ Unos 200 litros mensuales menos que va a vender 🙂