

Antonio Hernández comparte con nosotros la aventura que vivió tras recorrer 1.700 km con un Renault Zoe Q210 en un fin de semana. El viaje discurrió desde Zaragoza hasta Saint-Gaultier (Francia), en un trayecto de ida y vuelta. El Renault Zoe se trata de la versión Q210, capaz de cargar hasta 44 kW en corriente alterna y con batería ampliada a 41 kWh.
¿Es posible recorrer 1.700 km con un Renault Zoe en un fin de semana?
A continuación, os dejo con su relato:
Si no piensas viajar con tu Zoe en invierno, atravesando los Pirineos a -5 ºC para hacer 1.700 km en un fin de semana, pasa de este rollazo. Si es por curiosidad, espero que te entretenga:
Aunque no seas de viajar muchas veces por el extranjero con tu coche eléctrico y sea para una sola vez, me he dado cuenta de que merece la pena comprar las malditas tarjetas para activar los puntos de recarga (PdR). ¡Qué manía tienen muchos operadores de tener que activarlos con su tarjeta (badge) en vez de una de crédito! Y eso que alguno hemos encontrado.

Renault Zoe cargando en Restaurante Jiménez
Para Francia, como ha sido nuestro caso (la otra sufridora ha sido mi mujer, Inma) compramos la tarjeta de ChargeMaps por 19€ y nos llegó a la semana. Gracias a eso hemos podido activar más de la mitad de los PdR del viaje. Del precio ni hablar. Hemos cargado a 22 kW por 15 € y otras a 43 kW por 6 €, incluso una carga por 2,50 €. Si por la subida del precio del diésel han hecho una huelga de semanas, no quiero pensar en qué harán cuando la mayoría de los coches sean eléctricos. Vamos al grano:
- Salimos de Zaragoza a las 9:00 del día 10 de Enero.
- En España, por ser prevenidos, cargamos en un punto de Iberdrola en Tudela que incluía el cable. Llegamos con la app ya preparada. Fue todo bien. Hay un bar allí mismo. Tiempo empleado: 31 minutos para cargar del 49% al 81%. Energía recuperada: 14 kWh. Coste de la recarga: 4,2 €.
- También paramos a cargar en el PdR recién inaugurado de Iberdrola en Restaurante Jiménez. También con cable y misma app de Iberdrola. Fue todo correcto. Tiempo empleado: 51 minutos para cargar del 53% al 91%. Energía cargada: 22,2 kWh. Coste de la recarga: 6,66 €.
- Salto a Hendaya. Ya en Francia, fuimos al Lidl que tiene varios puntos de recarga de 22 kW. Tiempo empleado: 58 minutos para cargar del 53 al 96%. No miré los kWh cargados. Eso sí, fueron gratis. Hay un botón para activar el PdR, aunque también hay que pasar la tarjeta de ChargeMaps. En ese momento, se abre una trampilla para conectar tu cable de carga. Posteriormente, cierras la trampilla, lo que protege del robo y desconexión ajena. Un buen invento. Para abrirla hay que pasar la misma tarjeta de antes.
Seguimos carretera con la idea de llegar a Burdeos, pero el frío nos hizo replantear el tema. Aquí empieza la aventura.
- Primer batacazo. Área de servicio Shell. Había un trío de Corri-Door con buena pinta. Se activa bien con la tarjeta de ChargeMaps, pero al conectarlo al coche da error de carga y no hace nada. ¿Nos ha salido el Zoe caprichoso?
- Segundo batacazo. Área de servicio AVIA. Otro trío de Corri-Door idéntico al anterior. También se activa bien con la tarjeta de ChargeMaps. Pero de nuevo, al conectarlo al coche da error de carga y no hace nada. Empiezan las piernas a temblar y no era por el frío precisamente. Vamos al 10% y no da para llegar a Burdeos. ¿Sistema caprichoso?
Comienza a sentirse una situación de pánico.
- Paramos en un trío de MobiVE en Mios. Se activa con el llavero que me enviaron de Plugsurfing y carga perfectamente. No había nada allí cerca para ir andando, así que esperamos en el coche. Tiempo: 11 minutos. Cargamos 6,6 kWh de energía y el coste fue de 0.76 €.
Fuimos atrevidos y al 25% de carga, suficiente para llegar a Burdeos. Desconectamos y nos pusimos en ruta. ¡Craso error! Primera lección: Si funciona, hay que cargar al 80% por lo menos. De haber hecho buen tiempo o tener una cafetería cerca hubiésemos esperado, pero llevábamos unas ocho horas y media de viaje, habíamos recorrido 440 Km y aún estábamos a 350 Km de nuestro destino.
Llegamos ilusionados a Burdeos, pensando en una parada con merienda y calefacción de algún centro comercial. Con la que estaba cayendo, poco paseo por el centro de la ciudad.
- En el Centro Comercial InterMarché, hubo de nuevo un fallo en el cargador de Corri-Door. Empiezo a pensar que no tiene que ver con el coche, si no con la informática. ¡Ya van 3!
- Nos fuimos a por otro punto de recarga. Otra vez a un InterMarché. Podemos cargar activando con ChargeMaps. El Centro Comercial cierra a las 20:00 y no hay nada alrededor. Tiempo de carga: 1 hora y 24 minutos. Energía recuperada: 30.3 kWh y el coste de la recarga fue de ¡15,55 €!

Cargando en Angulema
Con bastante cabreo por la pérdida de tiempo (aún no había mirado el coste y pensaba que era gratis) seguimos hacia nuestro destino. Siguiente meta: Angulema.
- Allí fuimos directos a un Auchan con un punto de 43 kW. Al pasar del móvil a Android Auto, nos llevó a unos 500 metros del destino. Tras esta pequeña vuelta, llegamos al centro comercial que desafortunadamente estaba cerrado. El PdR se activaba con KiwhiPass que no teníamos. Intentamos darnos de alta en la app, pero obligaba a recibir una tarjeta en casa y era imposible. A por otro punto.
- Esta vez fuimos a un oasis. Había dos Destination Charger de Tesla, un trío que era el que queríamos utilizar, otro de no se qué y dos más que conseguimos activar con la tarjeta de ChargeMaps. Salvados por la campana, pero a 180 km de destino y eran las 22:00. Llevábamos 610 km en más de 13 horas. Una media de 47 km/h. Allí cargamos durante 1 hora y 10 minutos pasando del 21 al 80%. Cargamos 26.5 kWh y pagamos 7,9 €. Había abierta una pizzería que nos cerró a las 23:00. Por lo menos habíamos cenado y descansado un rato.
Visto que eran ya las 23:20, que teníamos la batería al 80% y una paliza descomunal, decidimos hacer noche en un hotel Ibis que había a 500 metros. Por lo menos descansamos bien.
- A las 6:30 del 11 de Enero me fui a cargar un rato al mismo de punto de la noche previa antes de empezar el viaje de nuevo. Tiempo: 45 minutos para cargar 8,3 kWh con un coste de 4,8 €. Con el 93% de carga y -5ºC de temperatura exterior iniciamos el viaje.

Con temperatura exterior de -5 ºC.
Todo bien, por decir algo, pero con el frio no hacíamos los 180 km del tirón. Nuevamente, nos tocó jugar con varias apps para ver dónde podíamos cargar.
- Decidimos hacerlo en Saint-Sulpices. Por cierto, en Electromaps está mal situado y nos costó localizarlo porque lo tapaban unos furgones. Conseguimos cargar durante 16 minutos, recuperamos 9.1 kWh con un coste de 5,9 €. Pasamos del 22% al 44% de batería. Había varios puntos de Ionity enfrente.
Por fin llegamos a nuestro destino: Saint-Gaultier. Habíamos tardado unas 16 horas y media. El coste de las recargas había sido de 46 € (+ 67€ del hotel). Dada la sorpresa a nuestra amiga Catherine, a quien íbamos a visitar, ahora tocaba disfrutar un rato.
- La comunidad (departamento) de Indre ha puesto mogollón de puntos de carga de 22 kW donde se puede cargar pagando con una tarjeta de crédito. La ilusión de este viaje. ¡Y aún mejor! ¡La carga completa eran 2,5 €! Llegamos, pasamos la tarjeta, se abrió la trampilla para conectar nuestro cable y a funcionar. A la hora de ir a quitarlo, como no podía ser de otra forma, problema: no detectaba la VISA y no abría la puerta. ¡Increíble! Tocó llamar al teléfono de atención y explicarles la situación. Después de un momento de tensión, abrieron a distancia la trampilla y pudimos sacar el cable. Nos regalaron la recarga.

Renault Zoe Q210 con batería de 41 kWh
¡Seguimos nuestra fiesta con los amigos! Domingo 12 de Enero. Tocaba volver, así que madrugamos. A las 8 ya estábamos en carretera. Por delante teníamos 800 km y una temperatura exterior de -3ºC.
- Limoges. Intermarché. Allí conseguimos cargar un buen rato. Activamos con la app Izivia. Metimos una tarjeta de crédito y te facilita un código (CODE). Eso sí, excepto un pequeño “tabac” a 500 metros no había nada cerca. Fueron 47 minutos de carga. Según la factura cargamos ¿4,7kWh?. No me cuadraba porque pasamos del 45% al 80% de carga. El coste fue de 13 €.
- La Quercy de Souillac. Un trío a 43 kW que activamos con Izivia. Tiempo de carga: 67 minutos. Pasamos del 22% al 89% de batería. La cafetería de enfrente cerraba a las 12 y llegamos justos para un café. El domingo es un mal día para viajar por Francia. No tenemos factura, ni cargo por ningún sitio.
- Montbartier Ionity. Lo activamos con ChargeMaps. La sorpresa agradable del día: un Ionity con 4 cargadores de 350 kW y un trío. Por 8,75 € cargamos 27,7 kWh durante 6 minutos y pasamos del 23% al 67%.
- Área de Comminges. Había 2 trios separados más de 100 metros. Habíamos parado en otros viajes allí mismo. Muy grande y permite un buen descanso. Activamos con ChargeMaps. Cargamos durante 1 hora y 10 minutos. Recuperamos 28,7 kWh por un coste de 19,70 €. La carga más cara, si mal no recuerdo.

Cargando en Alcarrás.
Aquí decidimos entrar a España por Lérida y no por Pamplona ya que eran 100 km más, lo que representaba 2 horas más de viaje y carga. Hay que decir que yendo a Zaragoza, fue imposible acceder por ningún paso de Aragón porque no había forma de cargar en ningún sitio en un tiempo prudencial.
- El punto de carga de Ainsa está cerrado por ser fin de temporada. ¡Olé por Fenie! En el resto de puntos de Huesca, Jaca o Sabiñánigo podíamos morir de frío o de viejos esperando a cargar. Manda h…
- Pont de Suert. Eran las 20:15. Estamos en un punto de Endesa. Para una app que tengo activada, con perfil creado y hasta con 50 kWh de carga gratis… ¡Estuve a -5 ºC casi media hora peleándome con ella! Si esto lo lee alguien de Endesa, le invito a contactar conmigo para poder comentarle las mejoras (simples) de su app JuicePass. No terminé en el cuartelillo porque mi mujer me paró. Iba a reventarlo. Frustración tras frustración. Prefiero no seguir, porque me enciendo. Fueron 47 minutos de carga, ni idea de los kWh que entraron en la batería. Pasamos del 37% al 75% y no he pagado nada, ni tengo factura, ni han descontado nada de los 50 kWh gratuitos. Malos hasta para eso.
- Alcarrás. Última carga y una de las mejores, por no decir la mejor. Funciona con la app EVCharge. Metes la tarjeta de crédito, seleccionas el cargador y a funcionar. El único pero es que obligaba poner un límite de tiempo o de carga y tuve que activarlo 2 veces. Estaba en la misma pared del restaurante ¡con un cartel luminoso indicándolo! Las dos camareras muy amables. Pudimos comer algo y coger temperatura. Cargamos durante 47 minutos, tiempo en el que pasamos del 25% al 72% de batería. Primero a 37 kW y después bajó la potencia de 29 kW a 21 kW. El coste fue de 4,2 €.
Quedaban 130 km de camino a casa con niebla, bajo cero y por la AP2 llegamos justos. El Zoe ya había quitado el indicador de km, estaba rojo y nosotros morados del frio. Era la 1:00 de la madrugada. El tiempo empleado era de 17 horas y 830 km recorridos.
Primera conclusión: Si lo vas a hacer, compra las tarjetas un tiempo antes y activa todas las apps con su tarjeta de crédito, usuario, dirección, color de ojos y todo lo que pueden llegar a pedir. No me puedo imaginar hacer esto para llenar un depósito de combustible.
Segunda conclusión: No lo volveré a hacer en estas condiciones. Te lo prometo Inma. ?
Tarjetas a solicitar por orden de preferencia para Francia: ChargeMaps, KiwhiPass, PlugSurfing.
Apps a activar necesarias: ChargeMaps, Plugsurfing, Izivia.
Apps a activar por si acaso: Freshmile, NextCharge, Ionity.

Datos del viaje
Opinión

Nuevo Renault Zoe ZE50 con batería de 52 kWh y hasta 395 km de autonomía WLTP
Para mí, la conclusión es clara: es posible recorrer 1.700 km con un Renault Zoe en un fin de semana. No obstante, la carencia de puntos de carga, así como la complicación asociada a la activación de los puntos, nos lleva a pensar que este sistema debe mejorar y mutar a algo más sencillo y uniforme. Que cada punto requiera de una tarjeta o una app diferente no ayuda en absoluto.
Otra cuestión, es la aventura de realizar un viaje con un vehículo eléctrico con una batería de 41 kWh y con unas temperaturas tan frías. No podemos obviar que los motores térmicos pierden fácilmente entre un 60 y 70% de su energía en forma de calor. Si enciendes la calefacción en un vehículo de combustión no se requiere de un gasto extra de energía. Sin embargo, un motor eléctrico es sumamente eficiente y apenas tiene pérdidas, por este motivo tiene que dedicar específicamente parte de la energía almacenada en su batería a calentar el habitáculo.
Quiero aprovechar para lanzar esta pregunta:
Si repostar gasolina es tan sencillo, ¿por qué el proceso de recarga de un vehículo eléctrico se torna tan complicado?
También deseo agradecer especialmente a Antonio Hernández que haya compartido con nosotros su experiencia de este viaje: recorrer 1.700 km con un Renault Zoe en un fin de semana.
Si queréis más información, podéis seguirme en mi cuenta de Twitter @Emilio_JFRey, donde habitualmente informo sobre mis consumos, noticias y artículos que publico. Os dejo mi código de referido de Tesla: http://ts.la/emiliojose3059
3 Comentarios. Dejar nuevo
Es una pena que gente que apuesta por la movilidad eléctrica se tenga que ver con toda esta problemática… Tiene solución si los que pueden legislar hacen las cosas fáciles. Para poder recargar una tarjeta de crédito/débito, todo lo demás es poner trabas y que la gente sea reticente. Saludos
Estas hecho todo un Bjorn.
Esta claro que hoy por hoy el eléctrico no es la mejor opción para viajes largos. Es una tortura y además bastante caro. Este viaje le ha salido a un coste de 5.51€/100km, es decir lo mismo que haría mi Swift a gasolina. No puede ser que a cada punto de carga necesites una tarjeta o una app… Y los precios deberían de estar regulados. Veo mucha falta de interés por parte de las administraciones. Espero que lo consigamos algún día, por el bien de todos…