Los resultados de ventas de vehículos eléctricos del año 2017 han terminado con un crecimiento del 146% con un total de 3.059 unidades vendidas a lo largo del año. Esto supone que el número de plazas de aparcamiento para vehículos eléctricos sea cada vez más demandada, ya que supone un aliciente para los propietarios y un beneficio para los comercios que habiliten dichas plazas, ya que se aseguran unos clientes fijos.
Poner un punto de carga para un vehículo eléctrico supone un pequeño coste o desembolso inicial. En mi caso personal, para mi plaza de garaje en un garaje colectivo (planta -2 y unos 40 metros de cable) el coste de instalación fue de unos 1.500€. Pero una vez hecha esa inversión el coste de cargar un vehículo eléctrico es irrisorio. Según la tarifa y potencia contratada el precio variará, en mi caso el coste de cargar mi VE es entre 0,18€ y 0,45€ por cada hora de carga (Según tramo: supervalle, valle o punta).
¿Qué quiero decir con esto? Que el gasto para un comercio o centro comercial es mínimo y a la larga puede suponer unos ingresos que le compensen con creces. No obstante el número de plazas de aparcamiento para VE en España es muy reducido, nada comparable a las existentes en otros países. Según la web de Electromaps, página de referencia en España para localización de puntos de carga para vehículos eléctricos, en la Comunidad de Madrid hay 324 puntos de carga localizados, pero en otros puntos como por ejemplo la provincia de Huesca únicamente hay 4. Aunque esto no implica que todos los puntos funcionen o estén disponibles.
Todo esto nos lleva a hacer un uso responsable y consciente de las plazas de aparcamiento para vehículos eléctricos. Para un vehículo 100% eléctrico poder usar un punto de carga supone llegar a casa o tener que llamar a la grúa.
¿Qué quiero decir con esto? Que hay que respetar las plazas de aparcamiento y el uso para el que han sido designadas. Pero esto no siempre sucede. Algo que bien saben los usuarios de plazas de discapacitados.
La falta de civismo nos lleva a encontrarnos con imágenes como las mostradas. En algunos casos podemos ver cómo, a pesar de haber plazas de sobra para vehículos térmicos, éstos aparcan en las de VE. En otras podemos ver cómo vehículos híbridos enchufables (PHEV) o vehículos eléctricos de batería (BEV) aparcan y cargan en plazas destinadas para una marca en exclusiva, como es el caso de Tesla y sus Destination Charger (DC).
Bajo estas circunstancias a veces los VE se ven obligados a aparcar de mal modo para poder acceder al cargador cuya plaza está ocupada indebidamente.
Y otras veces la falta de civismo viene de los propios propietarios de VE, que hacen mal uso de las plazas destinada para la carga de vehículos. Así, podemos llegar a ver vehículos eléctricos aparcados en puntos de carga sin hacer uso de los mismos, lo cuál resulta más indignante, si cabe, ya que un usuario de VE debería ser consciente de la relevancia de tal hecho. El pasado 13 de Enero, Saúl López denunciaba esta situación en su propia cuenta de Twitter.
Estas situaciones son indignantes para los usuarios de VE ya que cuentan con poder hacer uso de una plaza de aparcamiento, plaza que en ocasiones han tenido que llamar previamente para reservarla, y resulta que al llegar a destino está ocupada por un vehículo que no debería encontrarse ahí. ¿Qué sucede aquí? Nada más y nada menos que la falta de consciencia por parte de algunos propietarios. Si éstos conocieran la importancia y efectos de sus actos, muy probablemente dejarían de hacerlo. Sus acciones nos muestran la falta de respeto y consciencia que tienen con respecto a los demás. A estos propietarios les diría que despierten y se den cuenta que este planeta es de todos los seres vivos que lo habitan. Que me disculpen “sus ombligos“.
Aquí se podría abrir otro debate ¿quién tiene mayor prioridad de carga, PHEV/REEV o BEV? No cabe duda que la consciencia y un uso responsable es lo que debería predominar. En la práctica un BEV podría tener mayor “prioridad” ya que como decía antes supone llegar a destino o no. Pero no hay que ser obtusos, lo razonable es el respeto.
¿Tengo derecho a aparcar? ¿Necesito cargar al 100%? ¿Cuánto tiempo estaré cargando? Estas preguntas son las que han llevado a muchos usuarios de VE a dejar en sus coches notas indicando su número de teléfono por si es necesario que deje cargar a otro VE que lleve más urgencia. O incluso dejar notas del tipo: “mi carga termina en dos horas“, “pregunta en la recepción del hotel“…
Estas actuaciones nos llevan a un uso más cívico y respetable de dichas plazas de aparcamiento. Y obviamente, un estado de consciencia mayor por parte del usuario, ya que éste comprende lo importante que puede ser tener un punto donde cargar o no tenerlo.
Finalmente, para mí la cuestión es que únicamente una marca ha hecho por expandir su red de cargadores y esa es Tesla con sus Superchargers y sus Destination Charger. El resto de marcas venden vehículos pero no invierten en infraestructura de puntos de carga. Esto se debe a que dichas marcas no están interesadas en una transición rápida al vehículo eléctrico. Les interesa una transición lenta y paulatina, para no ver reducir sus ingresos drásticamente. Motivo que les lleva a producir vehículos con autonomías que no superan los 200 ó 300 kilómetros reales y no invertir en puntos de carga. Afortunadamente, poco a poco van lanzando mejores propuestas, pero a un ritmo lento, ya que Tesla demostró hace años que autonomías reales de 400 ó 500 kilómetros ya eran alcanzables con vehículos eléctricos. Pero este es tema para otro artículo.
3 Comentarios. Dejar nuevo
Es un problema de educación. En España no estamos educados para cooperar o para pensar en los demás, estamos educados para ser más “listos” que los demás. ¿Para qué dar vueltas buscando una plaza de aparcamiento si tengo una ahí vacía?. Me da lo mismo que sea para VE, minusválido o moto. Ahí aparco yo porque soy más listo que los que buscan un sitio donde no perjudiquen a nadie.
Artículo muy acertado, me ha llamado la atención, lo acertada, la idea de que las marcas estén retrasando la llegada de los Ve restringiendo la autonomía
Sin dudas los vehículos eléctricos son la solución para dejar de depender del combustible, y mejor aun si convertimos los vehículos de combustión actuales a un costo accesible. España hoy tiene la oportunidad de desarrollar medianas y pequeñas empresas de conversión. Esto mediante el proceso de convertir los vehículos actuales en eléctricos. Y eso es desarrollo local de I+D. Ya circulan 650 vehículos convertidos a eléctrico en América Latina y más de 250 solo en México. Con la ventaja de costar la mitad que un coche eléctrico de fabrica y con consumo eléctrico cinco veces menor que a gasolina. No se puede perder tiempo, esto ya tiene 20 años de aplicación en otros países. Organización Autolibre. autolibre.blogspot.com