Los vehículos eléctricos han llamado la atención de muchos consumidores estadounidenses. Pero no es solo el impacto ecológico de los coches lo que les ha llamado la atención durante este tiempo. También ha existido otro gran atractivo: un crédito fiscal federal de hasta 7.500 $ por vehículo. Ahora ese incentivo lucrativo puede desvanecerse por dos razones. En primer lugar, los compradores de vehículos a líderes del sector eléctrico como Tesla Inc. y General Motors Co. podrían agotar pronto el valor máximo de los créditos fiscales para sus marcas (están limitados para cada fabricante). Pero, lo que es peor para toda la industria, todas las provisiones de crédito para vehículos eléctricos en el código tributario de EE.UU. corren el riesgo de ser eliminadas como parte de las negociaciones en curso para el recorte de los impuestos sobre la renta.
Para entender qué podría pasar con las ventas de automóviles eléctricos si los republicanos eliminasen gradualmente los incentivos federales, vean lo que sucedió en Georgia. Las ventas de automóviles eléctricos crecieron vigorosamente hasta que este Estado redujo su crédito tributario por vehículo eléctrico en 5000 $ en junio de 2015. Las ventas se desplomaron desde unos 1.400 vehículos por mes en todo el Estado a menos de 100 el mes después de que el incentivo se redujera.
Los fabricantes de automóviles temen que se produzca una caída similar en las ventas si ese crédito federal desaparece. Perder el crédito hundiría las ventas de automóviles eléctricos justo al mismo tiempo en que la mayoría de los principales fabricantes de automóviles se están fortaleciendo para vender gran cantidad de vehículos eléctricos en los próximos años. “Los créditos son muy importantes”, dice Eric Noble, presidente de CarLab, una empresa de consultoría en Orange, California. “En los Estados sin mandatos o incentivos para el vehículo eléctrico se verá un agujero en las ventas“.
Los automóviles eléctricos siempre han sido una venta difícil para los estadounidenses, que están enganchados a los grandes SUVs y a la gasolina barata. Pero los créditos fiscales han ayudado a ventas jugosas, especialmente para vehículos eléctricos o híbridos enchufables de bajo precio, dice Noble. Incluso si el Congreso no elimina los créditos, cada fabricante -bajo el programa IRS existente- verá que el incentivo comenzará a desaparecer una vez que venda 200.000 coches eléctricos o híbridos enchufables. Tesla, Nissan Motor Co. y GM serían los primeros en ver mermar sus créditos, porque han vendido la mayor cantidad de vehículos eléctricos.
Si el gobierno mantiene el sistema dejando que siga su curso, es probable que Tesla llegue primero al límite. La compañía había vendido 127.000 unidades del Model S y el Model X hasta agosto, según IHS Markit. Con planes de producir hasta 10.000 Model 3 por semana, en algún momento del año que viene Tesla podría llegar a su límite máximo.
GM probablemente sería el próximo. El fabricante de automóviles había vendido 126.000 de su híbrido enchufable Chevrolet Volt hasta agosto, junto con 12.000 del Chevy Bolt EV y 7.000 del pequeño Chevy Spark EV, según IHS. Esos diversos modelos Chevrolet cuentan como un solo automóvil bajo el sistema de crédito fiscal. Nissan, por su parte, ha vendido 112.000 del eléctrico Leaf.
El programa no termina abruptamente cuando un fabricante de automóviles alcanza las 200.000 ventas sino que, una vez que un fabricante llega a ese número, los nuevos compradores reciben créditos cada vez más reducidos durante los siguientes cinco trimestres, momento en el que el subsidio desaparece. Por lo tanto, las marcas con créditos reducidos o completamente gastado estarían en desventaja financiera contra los competidores con modelos elegibles para el incentivo completo.
La industria carece de flexibilidad para no fabricar automóviles propulsados por combustible alternativo porque California, el mayor mercado automotriz de EE.UU., exige que una cierta proporción de las ventas de todos los fabricantes de automóviles en el Estado sean vehículos de cero emisiones. Si no alcanzan ese porcentaje, deben comprar créditos de empresas con mayor huella ecológica, como Nissan y Tesla, para compensar sus números.
Hay grandes implicaciones financieras. Si los Estados continúan imponiendo las ventas de EV, pero los incentivos fiscales desaparecen, los fabricantes tendrán que bajar los precios para obtener el volumen de ventas requerido por los gobiernos estatales, dice Noble. “En este momento, el mercado del EV no está impulsado por la demanda natural”, dice. “Si se elimina el crédito fiscal, se lo come el fabricante o vende menos vehículos”.
Los coches eléctricos ya son grandes productores de tinta roja. GM pierde 9.000 $ en cada Bolt que vende, dijeron personas familiarizadas con el asunto a Bloomberg a principios de este año. Y Tesla ha gastado 10.000 millones de dólares en el camino para convertirse en el líder en ventas de automóviles eléctricos.
Por ahora, los Estados están ayudando a impulsar las ventas de los fabricantes al otorgar exenciones tributarias para los compradores de vehículos ecológicos. Once estados tienen algún tipo de incentivo para vehículos de combustible alternativo, y más están considerando seguir el ejemplo. Las exenciones suelen oscilar entre 1.000 $ y 5.000 $. Nueva York comenzó con un crédito fiscal de 2.000 $ en abril, y Texas con otro de 2.500 $ en julio.
Para el próximo año, Tesla no debería sufrir apuros. Tanto el Model S como el Model X pueden costar fácilmente más de 100.000 $ cuando están equipados con una batería de mayor alcance y opciones de lujo. Algunos compradores adinerados de esos modelos ni siquiera se toman la molestia de cobrar el crédito fiscal, y la mayoría de ellos no lo necesitan para comprar el coche, dice Rebecca Lindland, analista de Kelley Blue Book, un sitio web de fijación de precios del automóvil. Pero los compradores del mucho más barato Model 3 -el intento de Tesla de abarcar un mercado masivo- pueden preocuparse más por los precios, dice ella.
El consejero delegado de Tesla, Elon Musk, dijo en agosto que, dados las más de 400.000 reservas que los clientes han presentado para el Model 3 presentado recientemente, su primer año de producción probablemente se agote. Después de eso, podría tener un momento más difícil, dice Lindland.
Los temores a una respuesta negativa de los compradores podrían explicar por qué GM y otros fabricantes de automóviles están dedicando más tiempo en introducir modelos eléctricos para asegurarse de que el crédito tributario se renueve y asegurándose de que la industria se ha comprometido verdaderamente con la movilidad eléctrica, gracias a los incentivos federales y mandatos de ventas tanto en California como en China, dicen dos personas familiarizadas con el asunto.
El portavoz de GM, Pat Morrissey, dice que los créditos “siguen siendo necesarios para ayudar a hacer crecer el mercado del vehículo eléctrico” y agregó que la compañía está trabajando con la administración Trump y el Congreso.
Detroit y sus rivales deberían tener un aliado inusual en el lobby verde mientras luchan por mantener vivos los incentivos. Pero con el presidente Trump amenazando con diluir los estándares de la economía del combustible para los automóviles convencionales, los créditos para los vehículos eléctricos no son una prioridad para algunos ambientalistas, que en su lugar se están enfocando en mejorar los automóviles impulsados por gasolina que aún compran el 99 % de los usuarios.
“Ayuda tener créditos tributarios para los vehículos eléctricos, pero los estándares de la economía del combustible son más importantes”, dice Daniel Becker, director de Safe Climate Campaign, que hace lobby en gobiernos y fabricantes de automóviles para apoyar tecnologías de automóviles limpios que combaten el calentamiento global. “Si vamos a progresar a largo plazo, será asegurando que tengamos motores de gasolina eficientes”.
5 Comentarios. Dejar nuevo
Lo que más me asusta no es que quiten las ayudas, que también, pero me da mucho miedo el tema del precio de la electricidad en cuanto el VE llegue a la mayoría de hogares. Me huelo una tarifa específica y obligatoria para cargar tu vehículo en casa a un precio similar al de la gasolina/gasoil. Espero equivocarme, pero es uno de los puntos que más me hacen dudar. Y más en un país como el nuestro, donde hay que mantener a mucho político.
Si bien es cierto que llegado el momento la electricidad se podría encarecer, cómo iba el gobierno a averiguar si el enchufe que estás usando dentro de tu casa es para recargar tu vehículo eléctrico? Otra cosa sería en la típica comunidad de vecinos en donde los contadores se pueden auditar. Por otra parte, en un futuro cada vez más cercano, mas establecimientos comerciales instalarán puntos de recarga con créditos del establecimiento y similares que harán más competitivo todo el sector.
Respecto al tema de la noticia: lo que deberían hacer los gobiernos sería no dar incentivos, (paguitas), a los dueños de los V.E, sino aumentar los de los de gasolina. Contaminas? Pagas.
¿Más impuestos?? no gracias, todos contaminan de una u otra forma, eso de los impuestos es cosa del nom, si hasta por respirar pretenden cobrarnos un impuesto, ¿respiras Silverhorse?…¡¡ pues PAGARáS!! jaja
no seas ingenuo por favor.
Por eso lo mejor sería tener un auto que funcione a energía fotovoltaica. donde vivo la energía eléctrica es carísima, también por culpa de los abusadores seriales hijos del nom de los políticos apátridas.
Pero contaminan menos los eléctricos aún teniendo en cuenta todas las fuentes de producción eléctrica