

Antes de decir nada debo confesar que soy un fan de Elon Musk. Así que, si por alguna extraña razón odias a muerte a este hombre, no se te ocurra seguir leyendo o te provocará una urticaria que te picará hasta dentro del intestino grueso.
Muchos piensan erróneamente que la industria de la automoción habría transicionado inevitablemente del mundo de la combustión al mundo eléctrico en algún momento dado, cuando ciertas condiciones utópicas lo hubieran favorecido. La realidad es otra, como lo demuestra el hecho de que incluso muchos años después de crearse Tesla todavía muchos fabricantes siguen sin tener el menor ánimo de realizar esa transición o esperan poder hacerla lo más lenta e infinita posible.
Porque ésta es la situación real ahora mismo, situación todavía más grave en el momento de fundarse Tesla: o bien los fabricantes pasan olímpicamente de lo eléctrico, como es el caso de Fiat, cuyo máximo responsable implora a los consumidores que no compren sus coches eléctricos, y además no tienen ninguna intención de crear nuevos modelos 100% eléctricos mas allá de los modelos que tienen por pura conveniencia; o bien los fabricantes están creando modelos 100% eléctricos con cuentagotas con la esperanza de que esta moda de lo eléctrico sea pasajera o bien pueda coexistir con la combustión clásica. ¿Cuántos fabricantes de verdad están creando modelos eléctricos a un ritmo adecuado que permita ofrecer al consumidor alternativas a sus modelos de combustión? ¿Y cuántos además lo están haciendo a un ritmo acelerado? Ni uno sólo de los fabricantes tradicionales. Todos desean continuar con el modelo de negocio actual el máximo tiempo posible porque saben que el nuevo modelo de lo eléctrico va a ser mucho menos rentable con diferencia. Vehículos con muchas menos piezas, con componentes fundamentales como la batería que no van a fabricar ellos, con menos problemas de mantenimiento, y con la posibilidad de restituir cualquier pieza, incluso la batería, cuando envejecen. Son cosas que destruyen el modelo de negocio tradicional de la automoción basado en la obsolescencia programada, en las redes de servicios oficiales, y en un control bastante completo de la fabricación de todos los componentes principales del vehículo térmico, en especial del motor.
Y así es cuando tuvimos la suerte y fortuna de ver aparecer a Elon Musk. A este hombre se le puede criticar lo que se quiera, pero lo que es innegable es que gracias a él y sólo a él ahora disfrutamos de un interés creciente en algunos fabricantes, que no en todos, por lo eléctrico. Antes de Tesla ocurrió el fiasco de General Motors y el EV1, una vergüenza torera del gigante americano. Coches eléctricos bastante buenos, con un público entusiasmado por ellos, que fueron retirados rápidamente para no causar más demanda en los consumidores. Y después de llegar Tesla y plantar su bandera, hasta el propio Bob Lutz reconoció que los de Silicon Valley tenían la culpa de que GM se decidiera a crear su Chevrolet Volt.

Chevrolet Volt
Elon Musk lo ha dicho en repetidas ocasiones hasta la saciedad. Vivimos en un mundo en peligro de extinción, aunque muchos no quieran creerlo. La urgencia para actuar es apremiante. Y por esa razón el lema de Tesla no es “vamos a crear muchos coches eléctricos”, sino “vamos a acelerar la transición hacia la movilidad sostenible”. Con todo lo que eso conlleva. Baterías para los hogares, células fotovoltaicas para cargar esas baterías, y todo tipo de vehículos 100% eléctricos incluyendo por supuesto automóviles.
Elon Musk saca una berlina eléctrica, tiene cierto éxito, y de inmediato vienen detrás, a rebufo, los Audi, Mercedes y demás fabricantes que están perdiendo cuota, a sacar su modelo equivalente para no perderla, no por interés de la salvación del mundo.
Elon Musk saca un superdeportivo eléctrico de prestaciones locas, tiene un enorme alcance en los medios, y en seguida vienen detrás los Porsche, Pininfarina y compañía a decir “ey, nosotros también”, para no perder su cuota, no por interés del planeta.
Elon Musk saca un camión Semi (cabeza tractora) para transporte pesado, el primero 100% eléctrico del planeta y, por supuesto, detrás vienen los demás a seguir la estela. Nunca hacen nada antes que el señor Musk mueva pieza. Se quedan de brazos cruzados esperando y esperando y volviendo a esperar a ver si toda esta movida loca de lo eléctrico que tanto les está estropeando el día se acaba de una santísima vez.
Pero no. Esto no se acaba. Esto acaba de empezar porque la ambición de Elon no tiene límites. Porque este hombre es un soñador empedernido para el que todo es posible si se trabaja a tope y sin mesura. Y mientras Elon siga ahí poniendo las ideas locas y las vías férreas para llevarlas a cabo no habrá industria de la automoción que pueda frenar eso. Es gracias a él que esta industria está conociendo una nueva era. No es una inevitabilidad que estemos asistiendo a tantos anuncios y tantos prototipos de coches eléctricos. Si hace diez años Tesla no hubiera sido fundada con parte del dinero de Elon, ahora ninguno de todos estos anuncios de coches eléctricos existiría, esta página web no existiría, este artículo tampoco, y Saúl López probablemente seguiría conduciendo un maldito coche de gasolina, subiendo videos a Internet únicamente sobre paisajes muy bonitos vistos desde drones. El mundo sería como en la peli “Regreso al futuro”. Muchas cosas que damos por sentadas no existirían, estarían desaparecidas como si nunca hubieran sido. Pero no tengáis pesadillas, amigos, Elon Musk ha regresado del pasado al futuro y todo sigue bien, todo está como debería estar, gracias a él. Ahora podéis escribir pasatealoelectrico.es en el navegador y ¡ey, uff!, estamos en el futuro, sale esta página.
Lo dicho. Menos mal que tenemos a Elon Musk y el mundo, gracias a eso, puede tener un atisbo de esperanza.
Nota: Este artículo ha sido escrito en colaboración con mi hija Nalda de 11 años, otra gran fan de Elon.
9 Comentarios. Dejar nuevo
No lo podias haber escrito mejor. Ya era hora que alguien iniciara esta revolución destinada a cambiar la forma que tenemos de hacer las cosas, de fabricar, de consumir…
Nos estamos cargando nuestro planeta por intereses puramente económicos y especulativos.
Ojalá hubieran más Elon Musk acelerando ese cambio de mentalidad.
Gracias! creí que era una loca al seguir metiéndome en esta idea de la sostenibilidad hasta que conocí a Musk por una casualidad y ahora me topo con artículos de lo más interesantes! sería genial intercambiar más información e ideas. Y empezar por el pro del crecimiento sostenible un grupo de estudios o algo así. Perdone la pasión de mis palabras.
Cuánta razón tienes !! Si no se le hubiesen cruzado los cables (qué bien viene aquí) a Elon Musk ,seguiríamos tan felices con nuestros petroleros y no tendríamos ni idea de que va todo esto de los eléctricos. Un genio !!
Ya lo veo que tengo que compartimos la posición fan nr1 con más que 1. Pero si, te doy todo la razón éste Elon es genial. Y empuje la humanidad por lo menos algo en la dirección adecuado.
Esta es la punta del iceberg, Musk pondrá al alcance de la humanidad la posibilidad y viabilidad de poder poblar otros planetas, cuando los robos estén por hacer todos los trabajos conocidos por el hombre de hoy habra el bingo a estar viajando a otros planetas, cuando los recursos naturales parezcan que se estén acabando habrá nuevos mundos para sembrar nueva vida, el hermano de Elon está trabajando duramente en el campo de los alimentos elaborados y empacados bajo techo…
Viva Elon!! teneis que poner en la tienda camisetas con su nombre, “Elon vs Zumo Dinosaurio”
El mundo debería estar lleno de entusiastas como Elon Musk para que las empresas y el capitalismo tuvieran cierta cordura y comenzarán a mirar hacia el interés de las personas y no de ellos mismos
Concuerdo con todo lo escrito, a excepción de un punto. Dudo que Mercedes, Audi y compañía hayan reaccionado porque Tesla le haha quitado cuota, aunque posiblemente sea porque en el futuro pueda pasar. Las ventas del model X en comparación al resto de SUVs es totalmente residual, dudo que se hayan visto afectado lo más mínimo por un par de miles de Model X vendidos.
Desde Costa Rica, país en donde tenemos una obsesión por la naturaleza, vemos con alegría y esperanza los cambios promovidos por Tesla en la figura de Elon Musk. El artículo recoge el sentir de muchas personas, gracias por ser elocuente y sencillo, aspectos que no dudo tienes a tu haber , pero también quiero creer que probablementes por la participación de Nalda tienen lugar. Los niños de hoy, un día cercano tendrán en sus manos la conducción del planeta, con esos criterios, estamos en buenas manos.