Dentro de un nuevo paquete de medidas para reducir sus emisiones contaminantes (plan “Ultra Low Emisions“), el gobierno del Reino Unido ha aprobado una nueva normativa según la cual deberán instalarse puntos de recarga en gasolineras de forma obligatoria, en especial las situadas en las autopistas.
Esto es una gran noticia de cara a la expansión de la movilidad eléctrica, pues cerca del 30% de los británicos no dispone de un lugar en casa para cargar el coche. Además, su situación en autopistas permitirá crear una red que posibilite largos viajes a lo largo y ancho del Reino Unido sin emitir ni un solo gramo de gases contaminantes.
Sin embargo, algunas gasolineras han expresado su preocupación, ya que la instalación de puntos de recarga en gasolineras pueden ser caras y apenas supondrán beneficio económico, por lo menos al principio. Para calmar los ánimos, el gobierno ha anunciado también la creación de un fondo de ayudas para llevar a cabo dichas instalaciones.
Fuente | Engadget