GE y Green Investment Group Limited (GIG) trabajan juntos en el nuevo parque eólico Markbygden ETT, en el norte de Suecia, para que sea el mayor de toda Europa en tierra con 650 MW y aumentando la energía eólica en el país un 12,5 %.
La idea es suministrar 179 nuevas turbinas, con un diámetro de rotor de 137 metros y una potencia de 3,6 MW cada una. Estas turbinas vienen con un diseño en las palas del rotor que incluye un sistema de deshielo y detección del hielo en ellas gracias a la empresa LM Wind Power. Esto hace que se pueda hacer un mayor uso de las mismas, ya que disminuye el tiempo de inactividad con un funcionamiento más estable. A parte de esto, la empresa GE se hace cargo del mantenimiento integral del parque eólico con una duración de 20 años.
En el tema de financiación, las dos empresas asociadas, que van al 50/50, han hecho una inversión de 300 millones de euros. Los demás socios de capital han sumado la cantidad de 500 millones de euros más en fondos, con la ayuda de bases de financiación de los bancos comerciales que trabajan con la energía nórdica, como el Banco Central Europeo, HSN Nordbank, KfW IPEX-Bank y NordLB.
Edward Northam, director del GIG dijo: “Se demuestra que en el mercado correcto, con la ubicación correcta, la tecnología adecuada y los socios adecuados, es posible desarrollar y atraer capital privado a nuevos parques eólicos en tierra “
La filial Norsk Hydro, uno de los mayores productores de aluminio en el mundo, ha decidido comprar la energía a través de una PPA (Power Purchase Agreement) para mantener el precio constante para las necesidad de sus plantas de producción.
El proyecto ya ha empezado a construirse con la intención de que, para mediados del 2018 ya empiecen a operar las turbinas, y para finales de 2019 estén en completo funcionamiento.