La marca de autos eléctricos Zacua obtuvo notoriedad en el 2017, cuando por ahí de agosto lanzó al mercado de manera limitada el primer auto de marca mexicana en dos versiones: hablamos del M2 y M3 que se caracterizan por ser autos citadinos motorizados eléctricamente por un valor de, en ese entonces, unos 460.000 pesos mexicanos (unos 20.000 € al cambio actual).
Si bien fue hace 7 meses su debut en donde incluso estuvo presente el Secretario de Energía, Pedro Joaquín Codwell y el Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Angel Mancera, la verdad es que no se ha vuelto a saber nada desde entonces.
¿Qué ofrecían los autos eléctricos Zacua por $460 000 MXN?
Autos eléctricos Zacua M2 y M3, Imagen tomada del sitio oficial del fabricante.
En el mercado mexicano por esa cantidad de dinero podía adquirirse un sinfín de posibilidades con más equipo, mejor rendimiento y, discutiblemente, un auto más bonito. Podías comprarte un auto de un segmento más alto e incluso un eléctrico como Renault Twizy o un Nissan Leaf de primera generación, pero en cuestión de eléctricos sólo a eso podías aspirar, el resto de las opciones eran autos con motores a gasolina o diésel o el Nissan Leaf.
Si bien la marca lo vendía en dos opciones, la realidad es que las únicas diferencias eran el diseño y el maletero, pues mientras el Zacua M2 ofrecía una capacidad de 247,5 litros, el M3 mejoraba esa marca con unos 487,5 litros, casi el doble que el primero.
Como mencioné, compartían la misma mecánica: un biplaza de tracción delantera con un peso de 685 kgs, motor de 34 kW con 87 Nm de par, batería de iones de litio de 18 kWh, recargable de cero a cien % en ocho horas, con una autonomía de 160 kilómetros según NEDC, frenos regenerativos y de disco en las cuatro ruedas.
Si bien en papel no suena nada mal, la realidad es que cuando lo tenías en frente de ti no lucía muy bonito y dejaba mucho que desear, sobre todo porque estabas pagando una buena suma de dinero con la cual podías comprar algo mejor, incluso de un segmento mayor. No estaba claro si el cliente a obtener por parte de Zacua era alguien que apoyara el medio ambiente, una persona que no le importaba qué estaba comprando siempre y cuando fuera eléctrico o una mezcla rara de estos dos. Sin embargo, se comprende que por ser una marca nueva iba a pedir un buen dinero por su auto, aunque pudieron esforzarse por obtener un mejor diseño o una relación justa de calidad-precio. Lo más arriesgado que pudieron hacer era comprar mercado y seguir fabricando más autos que pudiesen expandir su portafolio para gradualmente ir bajando el precio de este par y ganar más vendiendo un vehículo mejor para los más acaudalados. Pero no fue así y hasta ahora nada nuevo ha sucedido en cuanto a Zacua y sus autos, salvo una “edición especial” que no es más que un diseño inspirado en el xoloitzcuintle pintado en cofre y algunos adornos más. Nada especial.
¿Zacua murió antes de volar?
Podríamos decir de Zacua que, con un precio elevado y unos productos mal desarrollados en términos de seguridad la pregunta es de modo afirmativo, pues comprarlo era un riesgo ya que su armador es nuevo en el juego y poco se sabe de él, además de inseguro.
Si tal y como dice su presidente ejecutivo, llevaban 17 años pensando y planeando ¿es eso los mejores autos eléctricos Zacua que pudieron concebir en todo este tiempo? Incluso hace 17 años ya existían los airbags, algo que no fue creado en los últimos tres años para justificar el no incluirlas.
Y la verdad es que aún es muy pronto para poder afirmar un fracaso anticipado, pues apenas tienen un año en el mercado. Uno que ha sido difícil, tanto que incluso han tenido que subir el precio a poco más de medio millón debido al tipo de cambio del dólar. No hay que perderlo de vista y quizás en un futuro mejore. Si así fuera yo compraría uno.
