Mmmh… bueno, te estarás preguntando de qué dinosaurios hablo, pues para los entendidos del tema estoy hablando de la decadencia de los coches de combustión; y dirás, éste está loco ya que para que esto suceda falta mucho tiempo y quizás algunas décadas… pero lo cierto es que ya muchos países han optado por cambiarse completamente hacia la movilidad eléctrica.
Uno de los ejemplos más claros es China, quizás un país que de alguna forma se ve obligado por el gran tamaño de su parque automotor y la necesidad de contar con un aire más limpio y una mayor longevidad de su población.
Si analizamos la movilidad eléctrica desde sus inicios está muy claro que no es nuevo ya que en la década de 1880 surgieron los primeros modelos; claro está, no tuvieron éxito y pasaron al olvido. Sin embargo, hacia 1970 y 1980 surge nuevamente el interés de propulsar vehículos con electricidad, principalmente por la crisis petrolera de 1973. Pero el verdadero interés se da a comienzos del siglo XXI cuando General Motors abandonó el proyecto de los coches eléctricos causado por el desinterés de los usuarios. A raíz de esta noticia aparece Elon Musk y como resultado Tesla.
Si bien el vehículo eléctrico en un inicio presentaba muchas desventajas como la autonomía, baterías, puntos de carga, tiempos de carga, etc., Tesla demostró lo contrario y logró que se comercializaran de forma masiva, además de aportar aspectos positivos como reducción de ruido, amigables con el medio ambiente y con una autonomía igual o superior a un coche de combustión, lo que causó gran revuelo dentro del mercado automotriz y quizás el primer indicio de preocupación de las grandes empresas petroleras.
Las grandes petroleras han constituido el primer muro para frenar el crecimiento de la movilidad eléctrica debido a que, si se adoptara totalmente el VE, su negocio se frenaría drásticamente y surgirían grandes problemas de economía en los principales países productores de petróleo que dependen directamente de éste para sostener su aparato económico.
Es por esta razón que en el principio de la redacción haga énfasis en que a la movilidad eléctrica le falta mucho tiempo para posicionarme completamente dentro del mercado automotriz y, si bien varios países han establecido varios incentivos para los VE con el principal objetivo de reducir la contaminación y la emisión de gases, falta mucho por lograr en este campo.
En conclusión, lo que quiero promover con esto es la utilización de energías renovables y eficientes. No quiero decir que tengas que dejar de usar tu vehículo de combustión, pero sí manifestar mi deseo de que lo uses en menor medida y te comprometas con el cuidado de nuestro planeta que mucha falta nos hace ya que en la actualidad el tema es preocupante.
Como siempre quedáis invitados a proponer vuestro punto de vista.